El PET ostenta la tasa de reciclaje más elevada, con 27,1% del total registrado en 2022, gracias principalmente a la recolección bien establecida de botellas de PET a través de métodos formales
La producción de reciclado mecánico de plásticos en el mundo alcanzará casi 55 millones de toneladas en 2030, de acuerdo con estimaciones de AMI Consulting, lo que supone un aumento del 52% con respecto al volumen del 2022.
En 2022, la capacidad de reciclaje mecánico superó los 54 millones de toneladas, con una producción de 36 millones de toneladas de plástico reciclado en todo el mundo.
Pese a las previsiones al alza, se estima que la tasa mundial real del reciclado de plásticos básicos sólo alcance el 16.5% en 2030.
Crece el uso de plásticos en el mundo
De acuerdo con el informe Mechanical Plastics Recycling, elaborado por AMI Consulting, regiones como Europa y el noroeste de Asia realizan acciones para reducir el uso excesivo de envases, sin embargo, en otras zonas del mundo, como África e India, está aumentando la tasa de uso de plásticos, impulsada por la urbanización y el crecimiento de las clases medias.
El análisis destaca que Europa y el noreste de Asia también cuentan con infraestructuras relativamente desarrolladas de recogida de materiales reciclables, aunque algunos volúmenes se destinan a la incineración en lugar de al reciclado de materiales.
En diversas partes del mundo, el sector informal desempeña un papel crucial en la recolección de residuos postconsumo, centrando su atención principalmente en botellas y frascos. Sin embargo, otras aplicaciones postconsumo, como películas o plásticos rígidos que no son botellas, carecen aún de sistemas de recolección adecuados.
Como resultado, el PET ostenta la tasa de reciclaje más elevada, con 27,1% del total registrado en 2022, gracias principalmente a la recolección bien establecida de botellas de PET a través de métodos formales, sistemas de depósito de botellas y la participación del sector informal.
La aceptación del rPET de calidad alimentaria también está creciendo en países del noreste de Asia, el sudeste asiático y el subcontinente indio, generando nuevas posibilidades para emplear rPET en aplicaciones de mayor valor en el sector alimentario.