La Federación Británica de Plásticos (PBF, por sus siglas en inglés) ha publicado un documento de posición, Visión para la economía circular, que pide un control más estricto sobre las exportaciones de residuos plásticos a los países en desarrollo.

Apoyando una propuesta de Noruega de 2018 al Convenio de Basilea de la ONU, que proporciona una vía para controlar la calidad de los residuos plásticos exportados, BPF dijo que la medida estaba en línea con los esfuerzos actuales en el Reino Unido para aumentar las tasas de reciclaje.

Refiriéndose a las regulaciones de responsabilidad del productor en el Reino Unido, la asociación dijo que el logro de las tasas nacionales de reciclaje, en particular dentro del segmento de empaque para el consumidor, ha dependido en gran medida de la exportación de plástico de desecho parcialmente clasificado y parcialmente procesado.

«El BPF ha expresado su opinión en el pasado sobre la necesidad de reducir la dependencia de las exportaciones de residuos plásticos y, al mismo tiempo, impulsar la inversión para ampliar la capacidad de reciclaje nacional en el Reino Unido», señaló el organismo comercial en una declaración del 30 de abril.

En vista de la protesta pública sobre las exportaciones de residuos plásticos de baja calidad a los países en desarrollo y la creciente prohibición de las importaciones de residuos de los países del sudeste asiático, el BPF dijo que su documento de posición establece una estrategia «para un futuro flujo de materiales sostenibles para plásticos».

El documento, agregó, propone un conjunto de criterios de calidad que pueden aplicarse para garantizar que las exportaciones de residuos plásticos puedan reciclarse «de una manera ambientalmente racional» una vez que estos lleguen a su destino final.